Tus documentos y archivos están en la nube y para acceder a ellos y usarlos te basta con una conexión a Internet. Puedes acceder a través de una PC, un portátil, una tablet, un iPad o un smartphone.
Todo el software está en un único sitio. Ya no tienes que instalar tú el software en tu PC, tu portátil o todos y cada uno de los múltiples equipos de una red.
No sólo evita a los usuarios instalar el software, sino preocuparse por actualizarlo. Prácticamente el único software que se necesita tener instalado es un navegador de Internet.